domingo, 24 de abril de 2011

"DRIVING LESSONS" DE JEREMY BROCK

Nunca me han entusiasmado mucho los coches pero hoy, como no tenía nada que hacer, decidí ir con mi padre y con mi hermano a practicar un poco en ese noble arte que es la conducción. Era la primera vez que me ponía tras el volante... no así mi hermano que, a pesar de que es más pequeño que yo, me llega unas cuantas clases de ventaja. 

Lo que parecía una cosa no demasiado difícil en realidad era bastante complicada. ¡Podrían hacernos la vida un poco más fácil a los conductores! Que si punto muerto, que si el embrague, que si no estás en primera sino en segunda... Definitivamente, lo mío no es la conducción: Y no lo digo porque haya estado a punto de estrellarme con el coche - puedo decir orgullosamente que mis únicos errores estuvieron en el cambio de marchas y que el frenado era un poco brusco - sino porque soy un tipo al que le gusta mirar el paisaje y conduciendo no lo puedo hacer. Vamos, que no corre prisa eso de sacarme el carné.

Todo esto de las clases de conducir me recordó a una película inglesa que me gustó mucho y que os recomiendo: Driving lessons (Jeremy Brock, 2006). Conocí este filme nada más y nada menos por Rupert Grint y Julie Walters: Ambos son protagonistas de la saga Harry Potter y, como seguidor de la saga que soy, no es raro que tenga conocimiento de otros trabajos que hayan realizado fuera de la saga. Yo la compré en deuvedé en Inglaterra porque en muchos países no la han distribuido; así que si tu país es uno de esos muchos en los que no se distribuyó la película, no te quedará mas remedio que descargártela de Internet. Ah, eso sí, si preguntas por ella en una tienda deja claro que es el título de un largometraje de ficción... no sea que te den un curso en vídeo para aprender a conducir.

La estrella de Harry Potter, Rupert Grint, es en esta película Ben; un adolescente londinense cuyo único deseo sería escapar de las garras de su madre, una mujer estricta y muy religiosa. La oportunidad de escapar le llega, curiosamente, por sus padres; al pobre chico le han diseñado un programa de estudio y voluntariado con ancianos durante el verano: Y así conoce a Evie, una actriz retirara que le hará disfrutar de uno de los mejores veranos de su vida; un verano en el que caben Shakespeare, lecciones de conducir, baile y ligoteo.

Al más puro estilo Las chicas del calendario, la película dirigida por Jeremy Brock es una de esas que te hacen sentir bien. Divertida y entretenida, tiene un guión muy divertido y unas interpretaciones que se salen de la pantalla. Cine inglés, sí, pero del bueno. Nunca entenderé porque no salió mucho de su país de origen.

Si tenéis la oportunidad de verla, hacedlo, y si no... ¡Felices pascuas!

martes, 12 de abril de 2011

HABEMUS PRESIDENTE. ¿QUÉ PASA CON INTERNET?



Enrique González Macho, de 63 años, ha salido victorioso en las elecciones a presidente de la Academia de Cine. El productor y exhibidor ha ganado por una amplia mayoría – 256 votos frente a los 101 que obtuvo la candidatura encabezada por Bigas Luna – en unas elecciones que han obtenido un récord histórico de participación: Sin ir más lejos, en las pasadas elecciones no se llegó a contar más de 150 votos.

Tras la votación, González Macho ha comparecido ante varios medios de comunicación para exponer las ideas que tiene para la Academia: “Hay muchas cosas que necesitamos, lo primero son buenas películas que conecten con el público, más y mejores. [...] También hay que trabajar con los medios, hay que comunicar mejor y hacer docencia para que se conozca el proceso de comercialización del cine, para que se den noticias que se ajusten más a la realidad”.

No hay duda de que el nuevo presidente pretende continuar con lo que se ha venido haciendo largo tiempo y que van a seguir echando la espalda a Intenet. Parece ser que los Académicos no les ha gustado las ideas del anterior presidente en el cargo, Álex de la Iglesia, quién tuvo que anunciar su dimisión tras sus desavencencias con la Ley Sinde (un epígrafe de la Ley de Economía Sostenible que pretendía regular las descargas ilegales en Internet). El realizador vasco estuvo en un principio a favor de dicha ley; sin embargo, tras una serie de reuniones entre las personas que estaban en contra de la misma, se dio cuenta de que tenían todos muchísimos puntos en común y les dio la razón en algunos puntos como en lo referente a que la oferta legal no era suficiente o en lo de que el modelo de mercado necesitaba ser modificado y corregido. Y esa es la razón por la que tuvo que anunciar su dimisión, y porque estaba actuando por su cuenta cuando su figura representaba a los cineastas.

Para mí Alex es y será el mejor presidente de la Academia que hemos tenido hasta el momento. Fue el primero que dejó de ser más que un mero jarrón decorativo que soltaba un pequeño discurso en los Goya; y no sólo eso, es de los pocos cineastas que conozco que ha tenido la decencia de sentarse con personas que no comparten su mismo punto de vista con respecto a los derechos de autor. Estoy seguro de que el puesto que deja, el de presidente o presidenta de la Academia, va a volverse un puesto mucho más mediático: No sólo porque el director de Balada triste de trompeta lo convirtiera así sino por las circunstancias (ya saben, las regulaciones que se están dando para frenar la descargas).

Parece que a los académicos no les ha gustado esto de Internet porque la candidatura que ha ganado no parece que vaya a innovar mucho las líneas que ha seguido la academia los últimos años: Hacer mejores películas, atraer más público a las salas, etc. Y en cuanto al tema de Internet, Enrique González Macho ha querido restarle importancia afirmando que “va a haber debate pero no va a ser el debate”. Vamos, que todo quedará en un segundo plano.

No entiendo porque hay tantos cineastas que se cierran tanto a lo de Internet. Bien es cierto que por el momento no resultaría un negocio muy rentable debido a que hay demasiadas páginas que te ofrecen los productos gratis, y que habría mucha gente que optaría antes por esa última opción – aunque conllevase una pérdida notable de calidad. Es normal que las productoras no vean muy rentable esa vía y, sobre todo, teniendo en cuenta que ofrecen películas o series en Internet – un ejemplo de ello es Filmin, portal en el que puedes ver películas independientes en streaming [página que, por cierto, fue impulsada por González Macho ] – no han tenido una gran aceptación. Y eso que las películas que ofrecen, siento decirlo, no las ofrecen páginas de enlaces como Peliculasyonkis.

Ante tanta incertidumbre, ¿qué hacer? Nadie tiene una respuesta pero, obviamente, no creo que lo mejor sea no hacer nada ni esperar. Yo creo que la clave no es llevar todo el cine a Internet sino situarla como una opción más para consumir películas, series o música. No creo que el Internet vaya a acabar completamente con el consumo en las salas de cine ni siquiera acabará completamente con el formato físico. Ahora, otro de los problemas que habría que revisar son los precios, que en muchas ocasiones son excesivos. En primer lugar, porque el público mayoritario son los jóvenes y no somos un colectivo que se caracterice por estar forrados, precisamente; y, en segundo lugar, porque es muy caro incluso para Emilio Botín.

Para mí, esa serían las dos claves con la que comenzar un cambio necesario: Internet como una opción más, y no como la única, y reducir el precio de las entradas o las descargas. No sé si eso será lo mejor, pero lo que está claro es que cualquier cambio sea beneficioso para todo el mundo… que no haya ningún gran perdedor, vaya. Eso sí que estaría genial.

jueves, 7 de abril de 2011

"TORRENTE 4. LETHAL CRISIS (CRISIS LETAL)" DE SANTIAGO SEGURA


Han pasado más cuatro semanas desde su estreno y ya ha recaudado 18,4  millones de euros. Estas son las excelentes cifras que maneja la cuarta entrega de la saga Torrente, la más taquillera del cine español.

En Torrente 4. Lethal Crisis (Crisis letal) encontramos a nuestro héroe en uno de los momentos más bajos de su carrera (si es que se podía caer más bajo de lo que ya estaba). Todo esto parece que podrá cambiar si consigue cumplir un pequeño encargo que le reportará pingües beneficios; sin embargo, todo no saldrá según lo previsto.

Ante todo es un filme ameno y entretenido; además, por lo que parece, tiene un humor de un corte más ligero y amable que el de las anteriores entregas.  Lo que no falta en esta película son la infinidad de cameos de personajes famosos; futbolistas, tertulianas en programas de corazón... Todos los que te puedas imaginar, ¡y más! Personalmente, me quedo con la protagonizada por Pablo Motos y Florentino Fernández por ser la aparición más simpática. No nos podemos olvidar de los protagonistas de la película; de entre todos, destacaría el trabajo de Yon González - aunque esté algo sobreactuado.

El guión es flojo pero está lo suficientemente bien para que, como ya he dicho anteriormente, pases un buen rato viéndola. Destaca sobre todo por el ingenio del guionista (Segura) para meter todos los cameos posibles cada minuto.

En definitiva, es una película muy entretenida que hará las delicias de cualquier espectador; ahora, no le pidas peras al olmo, porque no da para más.

sábado, 2 de abril de 2011

"LOS MISERABLES. EL MUSICAL" (NUEVA PRODUCCIÓN POR EL 25 ANIVERSARIO)

Ayer tuve la oportunidad de ver Los Miserables, el musical que desde el pasado 18 de Noviembre se viene representando en el Teatro Lope de Vega de Madrid. Y un día después del evento, como viene siendo habitual, me dispongo a escribir una breve opinión sobre la función. Tengo que confesar que iba con la predisposición de ponerla bastante mal; sin embargo, antes de ponerme a ello, he visto este vídeo en el que se ve uno de los números musicales más impactantes de la obra: Sale el sol. Entonces, me serené y pensé: Joder, Enrique; vale, quizás no es el musical que más te haya gustado pero estaba bien:

La historia es bonita (aunque cueste obra y milagro enterarse de todo lo que ocurre porque se desarrolla a toda pastilla) y las letras no pierden a pesar de la traducción. Además, tiene una puesta en escena muy rica en atrezzo y en vestuarios de la época. Ahora, tengo que decir que los actores estuvieron un poco flojos de voz; vamos, en el vídeo que os he puesto los intérpretes tienen mucha más energía. Sin embargo, no creo que la culpa esté en los actores sino que la historia va muy deprisa. Yo le recomendaría al productor, Cameron Mackintosh, que volviera a producir la obra original (es que, por el veinticinco aniversario, han retocado un poco el musical: Lo han acortado y han cambiado la puesta en escena).

A parte de Sale el sol, hubo otros números musicales que me gustaron bastante: Amo del Mesón, Chicas guapas y Sálvalo. Son los que tienen más ritmo y en los que los actores pusieron toda la carne en el asador. 

En resumen: El musical estaba bien pero podría estar mejor. Me gustaría ver como es la versión londinense para compararlo, pero si lo hago será dentro de mucho tiempo. Y digo dentro de mucho porque me he dado cuenta de que los últimos musicales que he visto no me llegaron a gustar tanto como los de antes. Dice mi madre que es porque como ya he visto muchos, me vuelvo más exigente - vamos, que impresiona más por primera vez. Por eso he decidido que voy a apartarme de los musicales por más tiempo del habitual, para hacerlo más especial.

PD: El vídeo que os he puesto antes lo he llegado a ver 10 veces seguidas. :D