miércoles, 27 de enero de 2010

"NINE" DE ROB MARSHALL

En el año 1963 Federico Fellini (Rímini, 1920 – Roma, 1993) dirigió una de sus películas más famosas: 8 ½. El filme, de corte autobiográfico, narraba la historia de un conocido director de cine que mientras planea su próximo largometraje, comienza a recordar momentos importantes en su vida y a todas las mujeres a las que ha amado.
Mario Fratti (L’Aquila, 1927), conocido dramaturgo italiano, se inspiró en el clásico de Fellini para escribir el musical de Broadway Nine.En esos momentos Fratti pasaba por unos momentos de sequía creativa, identificándose con la historia el director transalpino, razón por la cual decidió escribir el libreto del musical.
Ahora Rob Marshall, director de la oscarizada Chicago (2004), adapta a la pantalla el musical de Fratti con un guión del fallecido Anthony Minghella y Michael Tolkin.
Daniel Day Lewis vuelve por segunda vez a las pantallas después de que regresara al cine con Pozos de Ambición, papel por el que recibió el Oscar a la Mejor Actor Protagonista en 2008. El actor londinense interpreta a Guido Contini que tras varias películas pésimas se embarca en los preparativos de un espectacular filme que supuestamente ha creado, pero del que no existe guión. De cara a los directores, la película ya está escrita pero sólo Contini y unas personas más sabe que aún no ha escrito nada. Mientras tanto, comienza a codearse con mujeres que han sido parte de su vida: Su mujer, su amante, su diseñadora de vestuario, su actriz predilecta, una periodista y una mujer que conoció cuando él apenas era un crío.

El musical más esperado del año es, sin duda, Nine. Sin embargo, puede que también sea el fiasco cinematográfico del mes de Enero. La película prometía, sin duda, pero no es lo que los espectadores nos esperábamos. El filme se queda encallado en una sola idea, la de que a Guido Contini se le han acabado las ideas. Por otro lado, este filme no es un musical propiamente sino más bien una película con ciertas escenas cantadas y bailadas. Es lo mismo que pasa con los clásicos de Disney, que no son musicales pero hay secuencias en las que hay canciones y bailes (recuerden el ¡Qué Festín! de La Bella y la Bestia (1991) entre otras).
No tiene fuerza, pierde el interés progresivamente, además de que no hay canciones pegadizas (excepto Be Italian y Cinema Italiano). Lo único interesante del filme son las interpretaciones. A pesar de lo que dicen las otras críticas, la interpretación de Daniel Day Lewis es fantástica. Yo veo a Guido Contini no a Day Lewis. No es sólo lo que dice o como lo dice, sino también cómo se mueve en pantalla, los gestos en su cara, sus andares y su mirada. No nos podemos olvidar de las fantásticas actrices de las que se rodea el actor británico. Penélope Cruz disfruta en su papel, y baila y canta con energía. Además, está muy sexy… porqué no decirlo. Lo mismo podría decirse de Judi Dech, a la que nunca habría imaginado de esta guisa. Su papel, una Edna Moda a la antigua, es uno de los más interesantes de la película. Marion Cotillard, que hace de la mujer de Contini, realiza una demostración de buena voz en la canción My husband is director. Su personaje me parece muy melancólico, pero su personaje es bastante memorable. No nos podemos olvidar de Fergie y Kate Hudson, quienes protagonizan las secuencias más electrizantes del filme.
El guión es anodino y tiene de todo menos gracia. Hay diálogos olvidables para regalar a un regimiento, y estoy seguro de que va a ser muy eficaz para dormir a las ovejas.
Nine, en definitiva, sobrevive al naufragio por sus interpretaciones pero es un film completamente olvidable.

martes, 19 de enero de 2010

"SHERLOCK HOLMES" DE GUY RITCHIE


Sherlock Holmes, el famoso detective creado por el británico Arthur Conan Doyle, vuelve a la pantalla de la mano del director Guy Ritchie. Esta vez, el mítico personaje se ve envuelto en una aventura que mezcla cine de acción y comedia.
La película cuenta uno de los múltiples casos de Holmes que, tras un periodo sin resolver ningún misterio, se lanza en la captura de un asesino al que ya había puesto entre rejas anteriormente:El gran misterio reside en que había asido condenado a la horca, causa por la que murió.
Robert Downey Jr y Jude Law interpretan a los protagonistas de la película, Holmes y el doctor Watson respectivamente. La complicidad entre ambos es muy visible, son un equipo de laboratorio por la química que hay entre ambos. Sobre todo destacaría a Downey Jr quien ofrece toda su energía para encarnar a un Holmes carismático y sarcástico. Por otro lado, Jude Law ofrece su versión de un Watson valiente bajo la capa de un chico serio y responsable.
En esta revisita a este conocido personaje no encontraremos ningún elemental, querido Watson, ni su característico sombrero... aunque no perderá su singular pipa. Este Holmes es una especie de Indiana Jones británico imitando a Jackie Chan. ¿O quizás intenta imitar al indespeinable 007?
Guy Ritchie innova en las escenas de lucha proponiéndonos una alternativa perfecta. Para ello se mete en la mente de Holmes antes de empezar una pelea, momento en el que calcula que movimientos va a usar y el irremediable daño que va a causar. Una forma de narración perfecta para intentar seguir las pequeñas trifulcas.
El filme en cuanto a la parte técnica, está realizado perfectamente. La reconstrucción del Londres victoriano es una de las lindezas de la película al igual que los efectos especiales que en ella se encuentran. Lo que más me ha llamado la atención es que estos elementos se hayan aplicado en una película de este calibre cuando muchas de las películas del género tienen unos efectos especiales cutres, un guión para niños de cinco años, una reconstrucción que parece que no existen los libros de Historia y unas interpretaciones pésimas.
Una historia ligera para reírte con las desventuras de este personaje. Además, todo parece indicar que Holmes viene para quedarse: Se avecina una segunda parte para el año que viene.

miércoles, 13 de enero de 2010

NIEVE, RENIEVE, REQUETENIEVE

El pasado lunes nevó en Madrid, y fue algo sorprendente. Hacía años que aquel manto blanco cuajara en cualquier acera de la capital era algo impensable. Sin embargo, desde el año pasado ya hemos vivido los madrileños varias nevadas en nuestra ciudad.
La nieve me gusta, lo admito, pero no cualquier tipo de nieve. Me gusta la nieve en polvo: Sí, como el Cola-Cao o el Nesquick. En esa nieve podemos andar tranquilamente sin miedo a resbalarnos, porque cuando la nieve es casi hielo no caerse es una hazaña milagrosa.
Cada vez que nieva me acuerdo de un libro que leí cuando era pequeño. No es que me gustará especialmente, ni mucho menos fue mi favorito, pero el título es bastante original: Nieve, renieve, requetenieve. Contaba la historia de una ciudad que después de siete días de intensa nevada ha perdido los colores de las cosas, así que los ciudadanos comienzan a pintar todo de nuevo de colores quedando una ciudad hermosa.
Esta imagen puede ilustrar lo que nos pasa a todos de vez en cuando, que perdemos los colores por cualquier cosa. Así que lo hay que hacer es repitarnos de nuevo y empezar con más fuerza. Quitate la nieve del año anterior, olvidalo todo, y empieza de nuevo con unos colores vivos. Al menos, es lo que yo voy a intentar hacer.
Por cierto, la foto de la Gran Vía nevada la encontré en Internet.

sábado, 9 de enero de 2010

SOBRE LA FELICIDAD


La infelicidad está de moda, al menos en Internet. Cada vez que navego por esta gran red me encuentro una miria de frases deprimentes: “Ya no sé qué es ser feliz”, “estoy hundido en la mierda”, etc. En fin, que cualquiera que lea esto podría pensar que los humanos somos unos infeliz. Sin embargo, y es lo que me molesta, al hablar con las personas que escriben estos mensajes no están tan infelices. Por eso creo que la infelicidad está de actualidad.

Por otro lado, también es cierto que muchas personas se cuidan mucho por fuera y poco por dentro. Hace unos minutos puse un comentario en una entrada de Crónicas Salemitas (www.cronicassalemitas.blogspot.com) , el blog de Pablo C. Reyna, en la que aseguraba que tenía existían unas pautas para alcanzar la felicidad. En realidad, yo lo escribí haciendo gala del poder de la improvisación pero considero que es imposible hallar la receta para alcanzar tal sentimiento porque la felicidad es como las galletas artesanas: Cada una es distinta. Aunque lo que si es cierto es que hay cosas que te llevarán más a la felicidad que otras y son estas:

· No preocuparse por tonterías. Reconozco que yo está pauta no la sigo, porque a veces me preocupo por nimiedades. Así que no hagas cómo yo, y líbrate de este tipo de preocupaciones.

· Ríete mucho, aunque eso implique que te mire toda la calle. Desde hace unos años mi risa tiene un volumen bastante alto, aunque ya poco a poco la voy controlando. Busca cosas que te hagan gracia y diviértete: Sólo así te lo pasarás bien.

· Ir al cine, al teatro o algún concierto. Estás actividades no son demasiado caras, y te permitirá pasar un buen rato y socializarte qué es algo que por culpa de Internet estamos perdiendo.

· Leer. La lectura te permitirá acceder a cosas que por otras vías nunca llegarías. Cultivando tu mente también llegarás a ser feliz, y sabiendo pensar te hará feliz porque hallarás menos limitaciones.

· Sentirse a gusto consigo mismo. No podemos tener un cuerpo como Pilar Rubio o Brad Pitt, pero haciendo algo de ejercicio o cambiando tu estilo puede hacerte más atractivo y sentirte mejor. Otra alternativa es la cirugía estética.

· Comer bien, sano. Los restaurantes de comida rápida están bien para ir de vez en cuando, pero comer alimentos sanos y cocinados con amor te harán sentirte mejor por dentro y por fuera. La fruta y el chocolate no deben faltar en tu menú. Toma la iniciativa y cocina tu de vez en cuando.

· Gastarse poco dinero y ahorrar. Si te gastas poco dinero y lo ahorras es como dejar el dinero a un lado y así poder comprate algo que realmente te gusta y lo necesitas. Si estás todo el día gastando, te preocuparás por el dinero y eso lleva a caminos a los que no queremos llegar.

· Leer este blog. Lo digo en serio, aunque esto vaya sobre la felicidad. Hace unos días me dijeron que este blog era graciosillo… así que esto podría venir bien.

· Ver el lado positivo de las cosas también te ayudará.

· No seguir las reglas reflejadas aquí, eso hará preocuparte y llegarás estresado e infeliz.

Espero que esto te haya servido y que te ayude a ser más feliz.

viernes, 8 de enero de 2010

UN CUENTO EXTRAÑO

El pasado día 5 de Enero, Miqui Brightside ( Hoy está lloviendo en París) publicó en su bitácora una lista de frases que le gustaría que le dijeran en este año 2010. Así que a mi lo que se me ocurrió fue juntar todas esas frases en un texto para que así alguien se lo pudiera leer en voz alta y así conseguir ese objetivo que el se planteó. Y aquí va la historia:
Tengo que decirte algo. ¿Te imaginas que el sol aparece en el cielo? No te rías, pero el otro día fui a la Plaza de la Cibeles. Me quedé observando a la famosa estatua y me pareció que dijo: "Hoy me miras distinto". De verdad te lo digo que creí que el monumento me estaba hablando, aunque para susto el que me pegó la dependienta de una pastelería cuando dijo "Me gusta como me miras". Menos mal que se lo estaba diciendo al novio, que iba después de mí en la cola. Acto seguido me llamó el chófer. ¿Dónde estás? Voy a buscarte, me dijo. Nunca. Nunca llegó. Porque él siempre mentía. ¿Qué haces aquí? Me pregunté. Hoy es uno de esos días de invierno en los que no me importaría que lloviera. Así que me fui al Londres dónde siempre hay algo que hacer. Me encontré con Woody Allen que le decía a nuestra Pe: Anoche creo que soñé con algo que tenía que ver contigo, pero ahora no me acuerdo. "Porque te quiero, ¿no?" decía Pe a Woody.
Tres días más tarde volví a Madrid. "Creí que no ibas a volver", me dijo mi compañero de piso. El daba una fiesta, y me preguntó si tenía un equipo de música.
-No - le dije - No canto muy bien, pero puedo tararear.
La fiesta fue bien, y mi ligue de una sola noche me preguntó: "¿A las diez desayunamos?".
No. Y soñé el Big Ben me decía: "Vuelve aquí". Volví a Londres, y el reloj me dijo " Creí que no ibas a volver". Entonces, alguien me llamó. Era la Cibeles. "Te echo de menos", me dijo.
Tengo que decirte algo. No te rías, pero este es el resultado de poner todas tus frases en un mismo texto. ¡Sorpresa! Ahora solo pide que alguien te las lea en voz alta. De verdad te lo digo que están todas.
Espero que te haya gustado. Obviamente, el texto no tiene sentido alguno y tampoco está relatada ninguna situación normal.

jueves, 7 de enero de 2010

GLENGARRY GLEN ROSS, DE DAVID MAMET

Glengarry Glen Ross, del escritor norteamericano David Mamet, volvió a las tablas españolas el pasado día 2 de Diciembre. El teatro Español de Madrid acoge la representación de la mano de Daniel Veronesse, quién es el responsable de la versión y la dirección de la función. Una hora y veinte minutos, que se pasan volando, es lo que dura una de los espectaculos que no hay que perderse este invierno.
La obra es una crítica al modelo materialista y competitivo que ha desembocado en la crisis económica y financiera que sufrimos hoy en día. Es por esta razón por la que estamos en una época perfecta para representarla, ya que el espectador tiene una empatía mayor con la historia debido a la proximidad de la trama con la crisis que padecemos.
La acción transcurre en una empresa inmobiliaria. Debido a una situación de crisis, deciden que el trabajador que menos venda será despedido mientras que el que consiga una mayor venta será compensado con un lujoso coche.
Esta versión de la obra cuenta con un reparto de lujo, dentro del cual encontramos a rostros muy conocidos de la pequeña pantalla como Gonzalo de Castro (de la serie Doctor Mateo) y Carlos Hipólito (que pone la voz en off al entrañable Carlitos adulto en la serie Cuéntame cómo pasó). Además, se encuentran en el reparto Ginés García Millán, Alberto Jiménez, Andrés Herrera, Jorge Bosch y Alberto Iglesias. Todos ellos ponen lo mejor de si mismos al servicio de sus personajes, destacando a Gonzalo de Castro, Alberto Jiménez y Carlos Hipólito que son lo mejor de la función.
La versión de Veronesse de la obra homónima es excelente. Sin embargo, le falta una pequeña introducción a la historia que hubiera permitido meterse en la trama más rápidamente. Los personajes empiezan a hablar de contactos y no sabes exactamente a qué se refieren hasta que empiezan a hablar de fincas, por ejemplo. A pesar de ello, no se utilizan apenas términos específicos de la jerga inmobiliaria por lo que la historia se sigue sin necesidad de ser un experto en la materia. Este punto es hasta cierto punto comprensible porque la función dura ochenta minutos mientras que la versión fílmica dura dos horas, es decir, por qué Veronesse ha omitido los minutos restantes de la obra. Sin embargo, la obra tiene la duración perfecta: No le sumaría más minutos porque la estropearía.
El elenco, como habéis podido comprobar, es completamente masculino y es uno de los aspectos más sorprendentes de la obra: En las obras de teatro suele haber más personajes femeninos que masculinos. No hay ninguna razón en especial, aunque probablemente sea porque son las féminas las que están más interesadas en este arte.
Glengarry Glen Ross estará en cartel hasta el próximo 17 de Enero de 2010 en el teatro Español. Las entradas están desde tres euros los martes y miércoles, y cuatro euros el resto de la semana (excepto los lunes, en los que no hay función). Las entradas se agotarán pronto, así que compra las entradas cuanto antes para ver esta obra ganadora del premio Pulitzer.

lunes, 4 de enero de 2010

"BIENVENIDOS A ZOMBIELAND" DE RUBEN FLEISCHER


Los no muertos están de moda en Hollywood. Después de rendirnos ante el mordisco de Edward Cullen y sus amigos, ahora toca el turno de los asquerosos zombis de Bienvenidos a Zombieland.

La película muestra a la Tierra asolada por zombis, en un futuro muy cercano, en la que cuatro no infectados lucharan por sobrevivir. La trama sucede supuestamente en los Estados Unidos, sin embargo no aparece la bandera de dicho país en ningún momento de la cinta. ¡Qué listos son los norteamericanos! Cuando se trata de salvar el mundo, la banderita que no falte. Eso sí, cuando se trata de zombis no son tan patrióticos.

Bienvenidos a Zombieland es una comedia divertida y gamberra, con un reparto interesante y que posee un ritmo rápido y correcto. Es una mezcla entre Pequeña Miss Sunshine y 28 Días Después, una mezcla entre cine catastrofista y una road movie. Además, debajo de toda esta masa de tiros, carreras, coches, etc. late una historia sobre la soledad y el sentirse parte de un grupo.

Como veis es una película muy recomendable, para no tomarse en serio y para pasar el rato. Yo me interesé por el filme cuando leí una entrevista al actor protagonista en un conocido dominical. El chico me cayó bien casi de repente y fue entonces cuando me enteré de la existencia del film. Habiendo recibido el premio del Público en el Festival de Sitges creo que sobraban ya motivos para verla. Reconozco que pensaba que me iba a reír más, pero la película me gustó.

El personaje de Jesse Eisenberg fue uno mi favorito. Me identifico bastante con él porque yo también sería el miedica si una banda de zombis asolara mi ciudad. Probablemente yo no habría sobrevivido porque algún zombi me habría pillado antes. Sin embargo, no tengo una timidez tan absoluta como él, ni me gustan tanto los videojuegos como para quedarme en casa. Su partenaire en la película, Abigail Breslin, es otro de los alicientes de la cinta. Nominada a un Oscar por su brillante interpretación de Pequeña Miss Sunshine, la chica interpreta a una chica que huye con su hermana a un parque de atracciones.

En fin, creo que ya me he extendido demasiado. Estoy seguro de que te gustará si vas a verla, porque para ser una película de zombis es buena. Quizás este es otro atractivo de la cinta, que es de zombis y es buena. Tampoco me considero un experto en este tipo de cintas, porque esta era la primera película que he visto sobre este tipo de criaturas. Por cierto, antes de terminar tengo que decir que una de mis escenas favoritas es cuando destrozan una tienda de productos indígenas. Como me gustaría a mí encontrarme una tienda vacía y poder romper todo lo que se me ponga por delante sin tener que dar explicaciones.