"INVISIBLE" DE PAUL AUSTER

El pasado día 1 de Diciembre de 2009 llegó a las librerías españolas la nueva novela de Paul Auster, Invisible. Según algunos expertos y seguidores del Premio Príncipe de Asturias, galardón que le dio a conocer en España, el libro promete volver a lo que Auster nos tiene acostumbrados después de que sus dos últimas publicaciones no hayan gozado del mismo entusiasmo de novelas como Brooklyn Follies.
Invisible es una novela que se lee de un tirón, muy fácilmente, gracias a que posee unos ingredientes muy jugosos que atrapan al lector: La intriga y los diálogos. Cuenta Invisible la historia de un joven estudiante de la universidad de Columbia, Adam Walker, que conoce a un hombre llamado Rudolf Born que le ofrece la posibilidad de financiarle una revista literaria.
Antes de asomarte a las páginas del libro deberás tener en cuenta que te va a enganchar, y mucho. Da igual los gustos que tengas, es un libro que satisface la curiosidad de todo aquel o aquella que quiera conocer lo que le ocurrirá al personaje protagonista.
Esa facilidad de lectura, es intriga, hace de Invisible una novela agradable de leer. Y a pesar de todo esto, no me ha dicho absolutamente nada. No se me ha quedado nada del libro, no he sacado nada en conclusión. Simplemente he conocido la vida de los protagonistas, ha sido como leer un cotilleo. También podría definirse como tomarse un bocadillo de jamón serrano. Cuando te lo estás comiendo te gusta y lo disfrutas, pero una vez terminado solo satisface tu hambre (la curiosidad por saber que pasa) pero no te acordarás del bocadillo más tarde.
Aún así, el libro es muy recomendable no sólo por las razones que he dado sino también por más.
Para empezar, una de las lindezas y virtudes del libro son los personajes. Auster, como buen creador y contador de historias, ha creado a unos protagonistas maravillosos gracias a que sabe cómo sacar de un personaje, al que aparentemente no le va a suceder nada interesante, sus sentimientos que le llevan a hacer esto o aquello, además de conocer cómo expresar los sentimientos que tienen sus creaciones.
En segundo lugar, la historia está contada desde el punto de vista de varios personajes y en diferente tiempo. Esto es un recurso que ya había utilizado Paul Auster en alguna que otra novela y se conoce que ha decidido volver a utilizarlo con esta. La narración se vuelve aún más interesante porque cada parte de la historia está contado por un personaje, una buena alternativa al narrador omnisciente que abunda en la literatura.
Para finalizar, no me puedo olvidar de los diálogos. Esta novela, para mí, no es muy descriptiva. Y eso me gusta. No soy muy fan del Realismo así que es lógico que las descripciones minuciosas no me gusten. Me aburre mucho que la trama se pare solo para describir una estancia o lo que lleva puesto un personaje. A mí lo que me gusta es lo que pasa y las cosas que dicen o piensan los personajes. Los diálogos hacen la narración más viva, y en esta novela los diálogos se gozan de ellos.
En definitiva, puedo afirmar aunque no tenga sentido que es una novela que me gustó aunque luego no me dijo nada. Disfruté mucho de su lectura, así que no tengo más remedio que agradecerle a Miguel que me lo comprará por mi cumpleaños. Se lo recomiendo a toda persona a la que le guste Paul Auster, y también para aquellas que no le han leído nunca. ¡Bravo Auster, pero sabes perfectamente que lo puedes hacer mucho mucho mejor!